Xóchitl Gálvez Ruiz, senadora de la República y aspirante a encabezar el Frente Amplio por México, anunció que presentará una denuncia penal en contra del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, así como del secretario de Hacienda y Crédito Público, Rogelio Ramírez de la O y del titular de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF), Pablo Gómez Álvarez, por diversos delitos fiscales.
En su visita al estado de Tlaxcala, y previo a su encuentro con mujeres y hombres de la entidad, sostuvo que la denuncia penal será violación al Código Fiscal y al secreto bancario, ello al revelar datos tanto de su empresa como de los clientes de la misma, lo cual está penado.
“El presidente cometió un grave error en mi contra; como no me encontraron irregularidades en mis cuentas, porque no he recibido dinero del erario público, porque no tengo una propiedad producto de la corrupción como funcionaria y el único pecado que me encontraron es ser empresaria, lo cual no es un delito, por eso estaré denunciando al presidente de la República, al secretario de Hacienda y el titular de la UIF por la filtración de datos personales, conmigo lo que quieran, cuando quieran y como quieran, porque soy una mujer valiente, que sabe que no tiene cola que le pisen”, refirió en conferencia de prensa.
Abundó que no tienen ningún temor de la campaña emprendida en su contra por el presidente de la República, pues reiteró que “no van a encontrar ni un peso mal habido”, de ahí que lamentó que “violen la ley e incurran en una violación al Código Fiscal, pues con lo que me hicieron, mañana pueden tomar a cualquier empresario de aquí, que les caiga gordo y hacer pública la información de cualquier empresa y eso es un pésimo mensaje internacional, para la confianza en el país, por eso voy a denunciarlo y espero que el fiscal esta vez sí actúe”.
Flanqueada por la presidenta estatal del Partido Acción Nacional, Miriam Martínez Sánchez y de la senadora panista, Minerva Hernández Ramos, Gálvez Ruiz enfatizó que el presidente “ya enloqueció y está apanicado”, ante el temor de perder la presidenta de la República, “porque sus corcholatas no calientan; su servidora en tres semanas he logrado un mayor posicionamiento que sus enviados, por eso tienen miedo”.
Abundó: “Con el miedo que me tiene el presidente me doy cuenta que hay en la sociedad mexicana un ánimo de creer en algo, de animarse a algo y ese algo resultó que fue su servidora, solo soy el vehículo de miles de mexicanos que están enojados, hartos de la inseguridad, hartos de los pretextos del presidente que le sigue echando la culpa al pasado y están enojados porque no hay medicinas en hospitales, no hay seguridad…”.
Lamentó los índices de inseguridad que existen en Tlaxcala, por lo que pidió a la mandataria Lorena Cuéllar Cisneros –emanada de Morena-, apoyar a los alcaldes para hacer frente a hechos delictivos de alto impacto.
“En Tlaxcala para qué les cuento, las cosas empiezan a poner delicadas; necesitamos una gobernadora que apoye a los alcaldes, porque no tienen policías, porque la policía que se tiene en los municipios no es para detener a los delincuentes del narcotráfico y otras historias que están pasando en este estado”, dijo.
En un acto masivo y ante cerca de mil 500 de simpatizantes del PAN, principalmente, la aspirante presidencial convocó a las estructuras de este partido y del PRI y PRD que integran el Frente Amplio, a la unidad y a la cohesión, a dejar los intereses personales o de grupo, para buscar el bien común, de cara al proceso electoral.
“Quiero convocar a la unidad, a que nos pongamos de acuerdo, así como yo dejé un proyecto en la Ciudad de México, todos tenemos que dejar algo para que al país le vaya bien… No me dejen sola es lo que les quiero pedir, porque se va a venir todo el poder del presidente contra mí, pero desde esta tierra le digo que no le tengo miedo”.
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