Llega a Tlaxcala, reliquia del corazón incorrupto de San Rafael Guizar

Arribó a Tlaxcala la reliquia del corazón incorrupto de San Rafael Guizar y Valencia, acto que el obispo Julio César Salcedo Aquino definió como el seguimiento a su misión de amor y misericordia, para otorgar una gracia o don especial a la feligresía.

En la Catedral de Nuestra Señora de la Asunción, el máximo representante de la Diócesis de Tlaxcala destacó que San Rafael Guizar y Valencia es el patrono de los obispos de México, además de un modelo de vida, discípulo y misionero de Jesús.

La visita que se extenderá hasta el próximo 30 de abril se traslada la mañana de este lunes al municipio de Chiautempan; el día de hoy, permanecerá en Xicohtzinco; arribará al Santuario de San Miguel, en Nativitas, el 24 de abril; en el templo de San Antonio de Padua, Calpulalpan, el 25 de abril.

El 26 de abril en la parroquia de San Martín de Porres, en Apizaco; el 27 de abril en el templo de San José, Tlaxcala; al Convento Franciscano de Huamantla llegará el 28 de abril; mientras que en el Seminario de Tlaxcala estarán las reliquias el 29 y 30 de abril.

Destacó la presencia de la reliquia del corazón incorrupto de San Rafael Guizar y Valencia, obispo de Veracruz, quien fue canonizado por el Papa Benedicto XVI, en el año 2006.

Explicó sobre la relevancia que tuvo al ser un obispo que entregó su vida al servicio de los demás, a pesar de enfrentarse a situaciones verdaderamente difíciles y en tiempos de persecución de la Iglesia.

San Rafael Guizar y Valencia estuvo 18 años al frente de la Diócesis de Veracruz, con sede en Xalapa, que actualmente ha sido dividida en ocho, de ese periodo 10 años estuvo en el exilio porque fue desterrado, debido a la persecución que vivía el clérigo y que lo obligó a estar fuera del lugar que le fue asignado al servicio.

Su compromiso con la iglesia era amplio, de ahí que siempre privilegio el aspecto de las vocaciones y a pesar de la persecución mantuvo abierto su seminario, al señalar que “al obispo le puede faltar la mitra, el báculo, inclusive su catedral, pero nunca le puede faltar su seminario”.

La reliquia del corazón incorrupto de San Rafael Guizar y Valencia arribó a la Diócesis de Tlaxcala, en un ambiente de algarabía, música de viento, porras y aplausos de la feligresía católica.

Las reliquias de primer grado de San Rafael fueron trasladadas a la Catedral de Tlaxcala y permanecerán en el sitio hasta las 09:00 horas de hoy, para después ser llevadas al municipio de Santa Ana Chiautempan.

Los vestigios de San Rafael Guizar y Valencia corresponden al corazón incorrupto, el cual está custodiado por un relicario de plata y que del 21 al 30 de abril estará recorriendo los municipios de Tlaxcala, Apizaco, Chiautempan, Xicohtzinco, Nativitas, Calpulalpan y Huamantla.

San Rafael Guízar y Valencia, fue sacerdote y obispo mexicano, se desempeñó en el estado de Veracruz, desde 1919 hasta su fallecimiento en 1938. Y es el primer obispo mexicano que es canonizado por la Iglesia católica.

A San Rafael Guizar y Valencia se le atribuye el milagro de la curación de labio leporino y paladar hendido de un niño aún en el proceso de gestación.

En el año de 1995 fue beatificado por el entonces Papa Juan Pablo II, acto en el que estuvieron presentes los padres de Rafael de Jesús Barroso, el “niño del milagro”.

En tanto, el 15 de octubre de 2006 en la Ciudad del Vaticano fue canonizado por el papa Benedicto XVI, convirtiéndose en el primer obispo mexicano en ser declarado santo. Quien fuera el quinto obispo del estado de Veracruz, se convirtió en el santo número 30 de México.

You must be logged in to post a comment Login